La Entrevista

Cuando estaba en la universidad, todo el mundo le decía "ingenebrio", a los estudiantes de ingeniería, porque había una proporción geométrica en su contra cuando se trataba de comparar las horas que pasaban estudiando, frente a las que usaban para estar frente a una botella de cerveza... el término es muy gracioso y hasta curioso si se puede decir, pero sirve para introducir esta simpática historia. Resulta que hoy llegó hasta el Instituto de Hidráulica (IHHS) de la Udep (mi alma mater) un grupo de ingenieros de la empresa brasileña Nolberto Odebrecht, para informarse sobre la marcha del estudio desarrollado por el IHHS sobre la primera fase del Trasvase Olmos.. el caso es que, debido a la importancia del tema para los lectores del diario que edito en Chiclayo, tuve que ir hasta la citada casa de estudios en busca de una entrevista. Como no quería ir solo, llevé a un amigo, a alguien de la redacción, pero no precisamente a un fotógrafo, como en otras oportunidades cuando tuve que cubrir comisiones... fui acompaýado de un diagramador.. todo resultó dictinto: el taxi nos quiso cobrar el doble de lo que generalmente cuesta, no dejaron ingresar el vehículo hasta el Instituto de Hidráulica y debimos atravesar el campus caminando, entre otras cosas.. felizmente hay muchos cambios en la universidad y las remodelaciones en mi ex casa de estudios están a la orden del día, y mirando los cambios se me hizo mýs corto el camino.. ufff.. hasta que llegué.. los "ingenebrios" de Odebrecht.. andaban revisando todo el modelo hecho a escala.. como si quisieran asegurarse de que el estudio iba bien... en fin, llegaron los periodistas de los demás medios y se formó un grupo regular.. llegaron las preguntas y la conferencia se improvisó pisando el mismo modelo, desde el cual nos explicaron todo... al cabo de media hora las preguntas cesaron y nos fuimos a la cafetería. 7up para beber, y sanguchitos de pollo con un ligero sabor a apio le cayeron muy bien a mi adolorido estómago.. Misión cumplida dije... al final del día, la nota que para mí no aportaba información trascendental, terminó siendo la portada de mañana. Cosas del periodismo. (27-04-05)

¿A quién le importa?

Hoy desperté contra el reloj... supuestamente tendría que haberme levantado a las 11 pm, pero se me fueron 30 minutos más.. debí correr contra el tiempo y anduve ocupadazo buscando una media que no encontré en la gaveta... jajaja.. fue toda una batalla... lo que pasa es que alguien me esperaba.. (una cita? tal vez, no lo sé, pero tenía el presentimiento de que iba a ser especial)... opté por calmarme y darme tiempo (sí, suena paradójico.. jajaja)... al fin pude salir de casa, rumbo al paradero una moto lineal me abordó (o yo la abordé? en fin), el conductor (un sujeto de unos cuatentipico con hondas señales de haber sido quemado por el sol)... me animó a subir -un sol cincuenta- me dijo.. jaja.. y yo que buscaba transporte justo por ese precio.. jajaja (no tenía sencillo pes, no es que sea misio.. jajaja)... Weno, ya montado en la moto iba mirando la av. Grau que a diario recorro para llegar al centro de nuestra ciudad, pero no había reparado en un pequeñísimo detalle: el conductor se aproximaba a la intersección de Grau con Gullman.. los silbidos me despertaron de mi sueño en la pista... y de pronto, un freno en seco de la motocicleta me hizo entrar en razón.. el peligro estaba cerca... sin mediar palabra giró a la derecha y fui llevado por las calles más polvorientas de San josé (y yo que pensé que ya no existían).. hasta que salimos por otra esquina.. de nuevo otro freno en seco.. y yo, tratando de entender lo que pasaba... resulta que el señor conductor se estaba tratando de escapar del operativo.. en su loca carrera contra el control, Mr Lineal se olvidó que llevaba una persona sobre sus dos ruedas y emprendió la retirada... polvo.. polvo.. nubes de polvo.. era interminable... sé que el color no se siente, pero literalmente en esta oportunidad me sentí un mimo.. con mucho maquillaje.. jajaja.. todo blanco... en fin, esa es la parte graciosa, porque luego vino lo peor.
Resulta que Mr Lineal seguía corriendo, creo que tenía delirio de persecusión... y era verdad, habían policías de tránsito por doquier, a pesar de todo traté de mantener la calma, hasta que llegamos a mi destino.. habría de verse la cara del conductor cuando me vio al bajar.. yo me miré al espejo y casi me dio pavor... blanco como la nieve.. con la sola imagen me negué a pagar... jajaja.. Mr Lineal se empezó a reír, mientras yo me moria de ganas de sacarle su michi, pero ni modo.. luego me dijo: -eso nos pasa por no respetar el derecho al trabajo de la gente. al alcalde no le importa si nos morimos de hambre... tengo cuatro hijos y me despidieron el año pasado en un recorte de personal....(bla bla bla) fue allí cuando empecé a entender mejor la necesidad que pasan muchas familias de nuestra ciudad.. y mientras sacaba mis monedas para pagarle al buen hombre, yo me preguntaba: -¿a quién le importa si quedé blanco?- P.D.: jajaja.. para los maliciosos que no faltan,... no se trataba del título de la canción de Thalía, ni mucho menos de que me haya declarado gay... así que cuidado con las ligerezas. (26-04-05)